Los frenos son parte fundamental en un automóvil, gracias a ellos es que aseguramos viajes seguros, para nosotros y aquellos que se encuentran dentro y fuera del coche. Por lo que la tecnología ha ido avanzando para cada vez hacerlos más seguros, y responder a las casualidades del camino. Por ello que los frenos ABS se han convertido en un imprescindible en los autos de lujo.
A pesar de que la tecnología de los frenos ABS solo necesita de una conducción normal para mantenerse en óptimas condiciones, existen cuidados que pueden extender su tiempo de vida. Lo cual a la larga no solo implica ahorro de dinero, sino que tu automóvil esté listo frente a cualquier vicisitud de las calles o carreteras.
Antes de ahondar en las recomendaciones para mantener tus frenos ABS funcionando a la perfección, es importante conocer qué son y cómo funcionan.
¿Qué son los frenos ABS?
De forma general, este sistema de frenos ABS (o Anti-lock Baraking System por sus siglas en inglés) tiene la función de evitar que las ruedas del auto se bloqueen al momento de presentar frenadas de emergencia.
Este tipo de frenos fueron diseñados para que los conductores puedan maniobrar con seguridad al momento de frenar y evadir obstáculos sin perder el control del auto.
¿Cómo funcionan los frenos ABS?
Este tipo de frenos cuentan con tres elementos básicos: sensores, una computadora y un módulo hidráulico. Los primeros se encargan de medir la velocidad del auto, los cuales envían esta información a la computadora que procesa dicha información.
Por último, si la centralita detecta alguna anomalía que pueda descender en un bloqueo de las llantas, el módulo hidráulico quita la presión a estas para que puedan girar, así obtener tracción y que el piloto pueda mantener el control del vehículo.
Por otro lado, si los sensores detectan que la velocidad desciende en alguna de las llantas, este sistema cambia la presión de frenado en cada neumático de forma individual. Esto es especialmente útil en terrenos complicados como caminos mojados por la lluvia o al conducir sobre la nieve.
Este tipo de sistema ya era usado en los ferrocarriles y, también, para el tren de aterrizaje de los aviones. Es hasta los años 70 del siglo XX cuando se comienza a usar en los vehículos automotores. De esta forma, los conductores pueden mantener el control del auto en condiciones desfavorables.
¿Cómo cuidar tus frenos ABS?
Una vez conociendo el funcionamiento de los frenos ABS, podemos intuir algunos de los cuidados, tal como una revisión constante de la centralita o mantener el nivel de las llantas. Veamos más a fondo cómo cuidar los frenos ABS de tu automóvil.
Cambiar el líquido de frenos periódicamente
El manual de tu automóvil te ayudará a saber cuándo y la frecuencia con la que debes cambiar el líquido de frenos. Con el tiempo y las condiciones de uso, el líquido de frenos se degrada y pierde sus propiedades químicas. Por lo que, si no se cambia con regularidad, puede generar problemas en alguno de los componentes del sistema de frenos ABS, tal como averías en las electroválvulas.
Mantener la medida y nivel de las llantas
Como se mencionó arriba, la centralita es la principal diferencia entre unos frenos normales a unos frenos ABS. Por lo que alterar lo menos posible las indicaciones de fábrica para un funcionamiento óptimo. Ya sea que cambie el diámetro, la altura, la cantidad de presión, esto afecta en la medición del sensor de velocidad, por lo que se puede generar un error que inhabilita el sistema ABS.
Y no es que dejes de tener frenos, pero la seguridad se disminuye y tienes que ir inmediatamente con un mecánico especializado.
Atención a la centralita ABS
Gran parte de los problemas suelen acaecer en la centralita, por lo que es de suma importancia estar alerta a cualquier problema. Ya que no es una refacción como tal, por lo que la manera de que nos avisa que algo va mal, es a través del testigo en el panel de mandos.
Por lo que, si aparece el símbolo de ABS en el mando, es tiempo de ir a un mecánico de confianza, ya que se mantendrán desconectados hasta que se revisen.